Las fiestas de Corralejas en Tierralta quedaron marcadas por la muerte de Carlos Vásquez, un joven aficionado que participaba en el evento.
Según testimonios, el incidente ocurrió cuando el joven colocó banderillas a un astado sin notar que otro toro había sido liberado en la arena, lo que provocó un ataque por la espalda que le causó una herida mortal.
Testigos señalaron que el accidente podría haberse evitado con mayor control en la administración de los toros, específicamente en la coordinación de su salida al ruedo. La comunidad exige a las autoridades medidas de seguridad más rigurosas para prevenir tragedias similares.
Este hecho ha generado un llamado a reforzar protocolos en eventos tradicionales para garantizar la protección de participantes y espectadores.
